¡Oh Cruz, esperanza única!
2 marzo, 2016Comentario al Evangelio – Vigilia Pascual en la Noche Santa
3 marzo, 2016
¡Pueblo mío! ¿Qué te he hecho?
Año XIV, nº 152, Marzo 2016
Sumario
1.- Escriben los lectores.
2.- El tercer lenguaje (Editorial).
3.- La voz de los Papas – El inferno: rechazo
definitivo de Dios.
4.- Comentario al Evangelio – Una «persecución» de la bondad divina.
5.- La liturgia de la Iglesia – Una catequesis en acción.
6.- Confianza en la restauración.
7.- ¿Sabía usted…
8.- Heraldos en el mundo.
9.- La vocación – El llamamiento de Dios, la respuesta del hombre.
10.- San Patricio – Un fuego que jamás se extinguirá.
11.- Sucedió en la Iglesia y en el mundo.
12.- Historia para niños… Discreto y eficaz amparo.
13.- Los santos de cada día.
14.- La paz que el mundo ignora.
Voz de los Papas
El inferno: rechazo definitivo de Dios
Morir en pecado mortal sin estar arrepentido ni acoger el amor misericordioso de Dios, significa permanecer separados de Él para siempre por nuestra propia y libre elección.
Comentario al Evangelio – Vigilia Pascual en la Noche Santa
Una «persecución» de la bondad divina
Mons. João S. Clá Dias, EP
Destruido el plan original de la Creación con el pecado de nuestros primeros padres, Dios comienza, en su infinita bondad, un proceso que culmina de forma grandiosa en la noche de la Resurrección del Señor.
El llamamiento de Dios, la respuesta del hombre
La vocación, principalmente la religiosa, es expresión de la bondad divina. El hecho de recibir de Dios una misión particular es garantía de que no hemos sido creados «por casualidad».
Un fuego que jamás se extinguirá: San Patricio
Erradicó de Irlanda el paganismo y encendió la luz del Evangelio con tanto ardor, que su campo de acción, aparentemente restringido, se convirtió en un foco de irradiación de misioneros para Occidente.
Historia para niños… o para adultos llenos de fé
Discreto y eficaz amparo
Al sentirse herido, Gabriel pensó que le había llegado su hora. Su vida pasó en un instante ante sus ojos. Lo que más le afligía era el haber mostrado tanto desprecio por San José…
Castísimo esposo de María,
glorioso San José.
Así como fue terrible
el dolor y la angustia de tu
corazón cuando creíste que debías
separarte de tu inmaculada esposa,
experimentaste después un vivo gozo
cuando el ángel te reveló el misterio
de la Encarnación.
(De la devoción de los
siete domingos de San José)